El tipo de interés del bono a diez años es la variable básica que, en nuestra opinión, guía el marco retributivo de la mayoría de activos regulados. Además, su influencia es clave en otros ámbitos esenciales como valoración de activos financieros e inmobiliarios, coste de financiación, déficits fiscales y salud financiera de la banca.
Tras el largo periodo de tipos ultra-reducidos, cortesía de las políticas heterodoxas de los bancos centrales, nos encontramos en un punto de inflexión decisivo, con la Fed reduciendo balance y el BCE dejando de comprar nuevos bonos…
Estamos inmersos ya en un proceso de endurecimiento de políticas monetarias y, por ello, el tipo del bono soberano debería subir. Las consecuencias en activos regulados y en la economía en general, pueden ser profundas. Este informe responde a preguntas clave como: