Anticipar la normalización de la inflación experimentada por las familias implica tener en cuenta la aceleración del PIB, por la mejora del poder adquisitivo y el descenso de tipos de interés vinculados. La inflación de alimentos está teniendo un impacto clave en la general, especialmente en Europa, pero también en parte en los EEUU. De ahí que sea crucial entenderla adecuadamente. En este informe estudiamos la evolución de los precios de los alimentos y la de sus catalizadores (materias primas agrícolas, energía...). Trazamos su evolución esperada y el decalaje entre las caídas del coste de las materias primas agrícolas, y la inflación alimentaria que pagan las familias. Finalmente, estimamos en qué momento dicha inflación debería estar por fin razonablemente normalizada.